Proyectos

La densidad de vehículos limita el flujo en las vías urbanas. Para incentivar que los conductores compartan su automóvil y así reducir la densidad vehicular, se está desarrollando una app para coordinar viajes de usuarios: http://pumaride.c3.unam.mx.

Inicialmente se enfocará en la comunidad universitaria, con la intención de liberarlo eventualmente a toda la Zona Metropolitana de la Ciudad de México. Al coordinar los viajes se espera que aumente la seguridad de los estudiantes, académicos y administrativos.

El objetivo es incrementar nuestra comprensión del fenómeno para poder mejorar los sistemas de transportes actuales y para prepararnos para flujos de vehículos autónomos.

Las demandas y los flujos en las redes de movilidad urbana cambian constantemente. Nuestra hipótesis es: que es posible mejorar (en comparación con los métodos actuales) los flujos en redes de movilidad urbana con métodos que se adapten a los cambios de demanda como aquellos basados en la auto-organización.

Los carriles reversibles son un ejemplo de adaptación en redes viales: durante unas horas algunos carriles tienen una dirección, la cual cambia a otras horas. Sin embargo, aunque se pueden detectar tendencias promediando flujos, las variaciones en tráfico vehicular se dan también en la escala de segundos, no sólo de horas. Métodos que puedan guiar las rutas de vehículos adaptándose en tiempo real (escalas de segundos) podrán aprovechar a fondo una infraestructura dada.

¿Cómo incentivar a los ciudadanos a compartir su auto? ¿cómo lograr que más gente use transporte público y bicicleta? ¿cómo se podría promover la solidaridad ciudadana? Como parte de la propuesta ganadora del Audi Urban Future Award 2014, se sugirió el desarrollo de una moneda de movilidad, mediante la cual los gobiernos puedan regular comportamientos de ciudadanos. Por ejemplo, se podrían recibir monedas por compartir el auto o usar bicicleta. Estas monedas deberían de ser aceptadas para pagar estacionamientos, peajes, transporte público y otros servicios. Teniendo un medio de intercambio de productos y ofertas de movilidad, se podrían coordinar necesidades y capacidades de infraestructura para aprovecharla mejor. Por ejemplo, con precios dinámicos (movilidad más costosa en horas pico y en vías saturadas) se pueden reducir los cuellos de botella y mejorar considerablemente la movilidad urbana. Para lograr estos objetivos, se requiere de una estrecha colaboración con gobierno y empresas que el LNCC puede gestionar.

La movilidad en México se realiza, casi en su totalidad, gracias a la quema de los contaminantes combustibles fósiles. Lograr mantener el Calentamiento Global Antropogénico por de-bajo de los dos grados centígrados, a lo cual se ha comprometido México al firmar los Acuerdos de París (2015) requerirá que se detengan todas las emisiones de CO2 antes del 2050. Y ello implica una reconversión energética que debe hacerse desde ahora. Y como el área del transporte es una de las principales generadoras de CO2, es menester transformarla en sustentable. Ello no es imposible y sólo es necesario dejar atrás el "modelo Detroit" (donde la movilidad se obtiene con autos y camiones) y adaptar un modelo de movilidad que usa como medios básicos el transporte público de calidad (mediante trenes, tranvías y BRTs (Bus Rapid Transit−, eso que en la Ciudad de México denominaron Metrobuses), la bicicleta e innumerables medios de transporte que utilizan energía metabólica y solar en sus innumerables variantes.

Reconvertir la movilidad de las urbes mexicanas implicará el establecimiento de un programa consensuado con las diversas instancias gubernamentales, así como con la ciudadanía. Para contribuir con este esfuerzo, se estudiará la literatura científica relacionada, se organizarán seminarios y un coloquio y se redactarán recomendaciones para los tres órdenes del gobierno y a la sociedad.

Somos criaturas de hábito. Muchas veces conocemos las reglas, pero para seguirlas conviene que nos las recuerden. Se convocará a un concurso de frases de educación vial para imprimirlas y distribuirlas entre la ciudadanía, ayudando a promover el respeto a las reglas que logran una movilidad más amable y eficiente, tanto en transporte público como privado.

También se realizarán más animaciones y videos para concientizar a la población e informar sobre las consecuencias de sus acciones. Se espera que una sociedad más informada en materia de movilidad pueda estar mejor preparada para los incrementos de población y vehículos que tendremos en los próximos años.